Actualización en el Diagnóstico y Manejo del Recién Nacido a Termino con Asfixia Perinatal.

Abstract

El diagnóstico de asfixia perinatal en recién nacidos a término es un proceso complejo que requiere una evaluación exhaustiva del historial perinatal, la condición clínica del neonato al nacimiento y pruebas diagnósticas. La evaluación inicial se basa en el puntaje de Apgar, además, signos de disfunción neurológica como hipotonía, convulsiones, irritabilidad o letargo son indicativos de encefalopatía hipóxico isquémica. Las pruebas diagnósticas incluyen la gasometría del cordón umbilical con acidosis metabólica. El manejo de la asfixia perinatal se centra en la reanimación inmediata y el tratamiento especializado para minimizar el daño neurológico y sistémico. La reanimación debe asegurar la apertura de la vía aérea, la ventilación eficaz y el soporte cardiovascular. La ventilación con presión positiva e intubación endotraqueal pueden ser necesarias en neonatos con respiración débil o ausente. La hipotermia terapéutica es el estándar de oro para el tratamiento de encefalopatía hipóxico isquémica moderada a severa. Este tratamiento ha demostrado reducir la mortalidad y mejorar los resultados neurológicos a largo plazo. Los neonatos que han sufrido asfixia perinatal requieren un seguimiento estrecho para detectar y manejar tempranamente cualquier retraso en el desarrollo o discapacidad neurológica. La intervención temprana con terapias ocupacionales, físicas y del habla puede mejorar los resultados a largo plazo. El diagnóstico y manejo de la asfixia perinatal en recién nacidos a término es un desafío clínico que requiere un enfoque multidisciplinario. La identificación temprana y el tratamiento adecuado son fundamentales para mejorar el pronóstico y reducir las secuelas a largo plazo.