Análisis comparativo del Síndrome de HELLP y la Preeclampsia Severa para un abordaje diferencial.

Abstract

El presente estudio titulado “Análisis comparativo del Síndrome de HELLP y la Preeclampsia Severa para un abordaje diferencial” tuvo como objetivo principal realizar una revisión bibliográfica exhaustiva sobre el síndrome de HELLP y la preeclampsia severa que incluya un análisis detallado de la literatura científica actualizada para identificar las principales investigaciones y hallazgos relacionados con estas patologías. En Ecuador, según el Ministerio de Salud, durante el 2023, se notificaron 100 muertes maternas, de la cuales el 25.84% (23 casos) correspondían a trastornos hipertensivos, siendo el síndrome de HELLP la mayor causa de muerte materna seguida de la preeclampsia severa. Hasta la SE (semana epidemiológica) 20 del año 2024 se han notificado 32 muertes maternas, dentro de las cuales el 9.37% (3 casos) corresponden a trastornos hipertensivos. Esta investigación se desarrolló bajo lineamientos metodológicos de carácter descriptivo y analítico, con el fin de establecer relaciones un análisis comparativo del Síndrome de HELLP y la Preeclampsia Severa. La recolección de datos se hizo por medio de una revisión detallada de investigaciones anteriores y datos epidemiológicos Los resultados obtenidos fue una visión amplia y actualizada sobre síndrome de HELLP y la preeclampsia severa gracias a varios hallazgos y avances logrados por distintos investigadores revelando así diferencias clínicas y diagnósticas entre el síndrome de HELLP y la preeclampsia severa, si bien, estos dos trastornos comparten eventos fisiopatológicos como una deficiente invasión trofoblástica, factores de riesgo y complicaciones, las características únicas del HELLP difieren de la presentación de la preeclampsia severa. El abordaje de ambas patologías contrasta significativamente, ya que en la preeclampsia severa se enfoca primordialmente en el control de la tensión arterial elevada y prevención de convulsiones, el síndrome de HELLP requiere un manejo más agresivo, incluso requiriendo cuidados intensivos por sus complicaciones catastróficas, por lo que es necesario un manejo oportuno, con el fin de reducir la morbimortalidad materno y neonatal.